El Pasado Oculto

Hay personas que no son sinceras con su pasado. Viven como si nada de lo que hicieron haya ocurrido jamás. Esconden tan bien sus errores y pecados por medio de mentiras, que ellas mismas terminan creyéndose la falsa versión que han inventado. Y lo peor es que, al final, se creen con tal elevado carácter moral que se ponen a condenar a otros y pensar que todo está bien en su interior, olvidándose de quienes son en realidad.

Pero no nos engañemos. El Señor ve más profundo que los ojos humanos, y la única manera de que la mano seca sea sanada es extendiéndola para que el Señor la vea, la única manera de que la oscuridad sea destruida, es exponiendo todo a la Luz. La única manera de borrar el pasado, es dejando de que el pasado esté oculto. Debes exponerte voluntariamente a los ojos de Jesús.

Vayamos hoy al Señor tal como somos, sin esconder nuestro pasado, que Él nos hará tal como Él es, convirtiéndose en nuestro presente y futuro. En su Luz veremos la luz.