5 puntos para entender la caída en el Edén
POR JUAN CAMILO TOVAR
La doctrina de la caída humana es un tema de suma importancia porque este acontecimiento histórico hace que entendamos lo imprescindible del ministerio de Jesús en la existencia de la humanidad, su encarnación, su vida obediente, su muerte y resurrección son determinantes para atraer al ser humano de nuevo a la bondad suprema, la cual ningún hombre posee en sí mismo.
Por lo anterior voy a describir 5 puntos acerca de cómo debemos entender la caída.
Primero me voy a apoyar en las declaraciones de Jesús dadas en Mr. 10:18 y las declaraciones de Pablo en Ro 3:10-12,23, en estas declaraciones se nos indica que ¡no hay ni un solo hombre bueno! que no hay justo ni aun uno y que por ello todo hombre esta destituido de la gloria de Dios. Esto nos muestra claramente que ningún ser humano puede volver a ser bueno según los estándares de Dios, puede que en términos sociales haya alguna persona mejor que otra, en cuanto conducta externa se refiere, pero pensar que podemos ser agradables a Dios por nosotros mismos sin Cristo es ignorar absolutamente la santidad de Dios y toda la Escritura, Dios no puede ser satisfecho con nada impuro en absoluto, y todo ser humano es impuro aun desde el vientre de su madre, Sal. 51:5.
Ch. Spurgeon dijo: “aunque la serpiente este en el huevo sigue teniendo una naturaleza venenosa”.
Segundo, vamos a analizar brevemente la naturaleza humana.
Todo ser humano está atrapado en su propia naturaleza pecaminosa, la actividad de la mente y el corazón tiene una inclinación espontánea al mal, nadie puede deshacerse de sus malas emociones ni de sus malos pensamientos, solo pueden ser encubiertos por una buena conducta, pero las enemistades, el orgullo, las soberbias y lujurias, entre otros, siempre van a ser parte de la actividad de la mente y el corazón, esto pasa porque la naturaleza determina la conducta de todo ser vivo.
Pensar que podemos ser agradables a Dios por nosotros mismos sin Cristo es ignorar absolutamente la santidad de Dios y toda la Escritura.
Tercero, la declaración de fe de Westminster concluye muy bien el acontecimiento y resultados de la caída, en su declaración nos indica que el hombre fue creado bueno y justo originalmente, pero se pervirtió y por ello fue expulsado de la rectitud, la salida del edén no solo implicó la salida de un lugar físico, también debemos entender que el hombre fue expulsado de la presencia de Dios, quien es la fuente del bien y la justicia, estar separados de Dios tiene como resultado estar lejos de todo lo que puede hacernos buenos. Jesús afirmo que sin él nada podríamos hacer. Jn.15:5.
A pesa de toda esta terrible condición, el ser humano quedo con vestigios de esa obra perfecta que un día fue, y ya que el hombre fue creado a imagen y semejanza de Dios, todavía tiene algunos restos de esta imagen en su conciencia, sin embargo la conciencia no alcanza para hacernos perfectamente buenos porque si la conciencia pudiese acercarnos a Dios, entonces Cristo dejaría de ser el fundamento de toda salvación.
En cuarto lugar, quiero exponer la obra redentora de nuestro señor Jesucristo.
El derramamiento de la sangre de Cristo era el único medio por el cual podríamos obtener la limpieza del corazón caído, solo por la sangre de Cristo se obtiene la libertad de la maldad natural del ser humano. Ninguna capacidad humana podría hacernos limpios de corazón, todas las buenas obras de los hombres siempre están contaminadas de intenciones egoístas, y lo peor de esto, es que no lo vemos porque estamos ciegos en nuestra humanidad y no podemos percibirlo porque solo el espíritu santo puede iluminarnos para ver nuestra condición.
El derramamiento de la sangre de Cristo era el único medio por el cual podríamos obtener la limpieza del corazón caído, solo por la sangre de Cristo se obtiene la libertad de la maldad natural del ser humano.
Quinto, solo el Espíritu Santo puede iluminarnos de tal manera que podamos ver nuestras propias injusticias, sin él, ningún hombre puede arrepentirse verdaderamente, tampoco tener fe legitima, ni siquiera podríamos acercarnos a Dios voluntariamente ya que la voluntad quedo esclava del máximo deseo de todo ser humano, este máximo deseo es egoísta y siempre busca el beneficio propio, incluso cuando alguien se “acerca a Dios” sin la ayuda del Espíritu Santo, lo hace por temor al infierno o por amor a la recompensa, y este interés hace imperfecta y estéril toda búsqueda de Dios, sin embargo el Espíritu Santo puede llevar hacia Dios de manera pura a cualquier hombre, sin intereses humanos de por medio, y solo a buscar su santo ser sin buscar lo que el da interesadamente.
En conclusión podemos observar que en la caída, el ser humano quedo completamente incapaz de salvarse así mismo, la expulsión del edén dejo su voluntad y afectos contaminados con la fuerza del pecado y por sí mismo nunca podrá acercarse a Dios legítimamente, solo por la obra de Cristo y el llamado del evangelio, y la atracción del Espíritu Santo hacia Dios podemos llegar a ser verdaderamente buenos. El hombre es incapaz y Dios es todo poderoso.
Juan Camilo Tovar
Maestro Iglesia Del Camino. Colaborador
5 Comentarios
Gracias
Gracia y paz amado hermano! Hermosa reflexión de vida. Es increíble como cambia todo cuando conocemos la Santidad Dios y luego vemos nuestra propia condición humana.. Es ahí cuando venimos desesperadamente corriendo a los brazos de Cristo, siendo el único camino y el único capaz de salvar nuestras almas. Dios siga guardándote siempre. Oro por ti y tu ministerio. Sea siempre para Dios toda honra.
Excelente maestro mi hermano Juan Camilo Tovar. Dios te siga usando en ese ministerio. Tus palabras son muy claras y sabias. Claro sólo dices lo que dice la Biblia, sin embarga tu forma de explicarla es muy veraz y precisa.pprecisa. Pocos saben hacerlo así.
Excelente contenido siempre se explica claro y sencillo.
Esta es una doctrina de verdad muchas gracias